"Léon Signoret. 1857-1919, Barcelonnette". Este pueblito de los Alpes
franceses fue el origen de muchos industriales destacados en México, principalmente
entre 1850 y 1950. Entre ellos uno de los fundadores de la Fundidora. Conviene
precisar que la huella de esos
inmigrantes franceses no es tan presente en el norte de México como en el
centro del país. En México, Guadalajara o Puebla, algunos recuerdan su
increíble saga. Sin embargo, son pocos los que saben que Fábricas de Francia y
Liverpool (dos nombres para un solo grupo), o El Palacio de Hierro son unos
símbolos visibles de esta herencia.
Así que
resulta que el que es hoy el 1er país de emigración en el mundo fue un país de inmigración, y Monterrey no fue excepción
en la materia.
Todavía hoy en día se puede observar
las "villas mexicaines" en ese valle alpino y el Consulado honorario
de México en este municipio de menos de 3000
habitantes.
Con todo, el estudio de
estas aventuras familiares sigue siendo una asignatura pendiente pero también
lo es la de todos los demás mexicanos que han luchado y siguen luchando para
que su fuerza de trabajo baste para alimentar a su familia.
Para saber más:
Isidro Vizcaya,
Los orígenes de la industrialización de Monterrey (Fondo
Editorial de Nuevo León, Itesm, 1969)
Mario Cerutti, Burguesía
y capitalismo en Monterrey 1850-1910 (Fondo Editorial de Nuevo León, Itesm, 1983)
